LA MUJER TRABAJADORA

Había una vez una mujer llamada Matilde y no paraba ni debajo del agua...
Matilde era una mujer sencilla, guapa, agradable, cariñosa...
Ella tenía seis hijos llamados : Jose, Javier, Francisco, Adrián, Ulogio y Laura. Matilde trabajaba sin descanso y no le pagaban ni la mitad de lo que cobraba su marido, entre el trabajo que era de siete de la mañana hasta las doce de la noche y cuando llegaba tenía que lavar, fregar, limpiar, hacer la cena y la comida para el trabajo de  Jose (su marido), darles de comer a los mellizos Adrián y Ulogio, duchar a los niños, etc... 
Matilde no tenía ayuda solo la de su hija mayor : Laura, que hacía lo que podía.
Un día Matilde se quejó a su marido y el le pegó un guantazo y dijo :
-Estás loca, no pienso ayudarte a las tareas de mujeres, como me lo vuelvas a decir eso... Mejor no te lo digo, porque si no te vas a asustar.
Entonces Matilde se calló y se fue a seguir limpiando. A la mañana siguiente, Matilde se fue a trabajar y en el trabajo unas amigas le preguntaron que por qué tenía tantas ojeras y ella respondió :
-Es que esta noche no he podido dormir casi nada porque los mellizos me han despertado llorando y luego no he podido recoinciliar el sueño, además mi marido no me deja parar.
Entonces dijo su amiga Cecilia :
-No es justo, mi marido es igual, pero por lo menos mis hijos/as me ayudan. Tenemos que revelarnos contra los hombres.
-Es verdad dijo María, pero Matilde respondió :
-Mi marido dice que si me vuelvo a quejar que me voy a enterar...

A la noche, Matilde se fue a la cama y soñó que estaba en un mundo mejor, donde la igualdad existía y donde su marido le era fiel y agradable y que él y sus hijos le ayudaban y le querían, pero ella pensó que no sería realidad.

Pasó el tiempo y Matilde fue cambiando a mejor; ella le decía que no a su marido y a sus hijos y ellos se veían obligados a hacer las cosas solos y poco a poco el mundo fue cambiando, Jose y sus hijos apreciaban más a su madre y mujer, y gracias a Matilde y otras mujeres que se revelaron, el mundo salió adelante, siempre con la igualdad.

FIN

POR ESO TODOS TENEMOS QUE COLABORAR EN CASA Y ASÍ NUESTRAS MAMÁS Y ABUELITAS NO TENDRÁN TANTO EXTRÉS Y TRENDÁN TIEMPO LIBRE...

PONTE EN PIÉ Y... LIBÉRATE.
PORQUE EL DÍA INTERNACIONAL DE LA MUJER NO SE DEBE CELEBRAR, SI SE CELEBRA ES UN PROBLEMA MUY GORDO.

NOTA INFORMATIVA : Esta historia habla de el día contra la Violencia de Género y del día Internacional de la mujer.

ESPERANZA VARGAS PÉREZ